Bogotá, la capital colombiana, se encuentra sumida en una creciente ola de inseguridad que ha generado pánico entre sus habitantes. La escalada de atracos, robos y tiroteos ha llevado a la Confederación Nacional del Gremio de la Seguridad Privada (Confevip) a presentar una propuesta al gobierno de Gustavo Petro y a la alcaldía de Carlos Fernando Galán. La iniciativa busca integrar a 450,000 vigilantes del sector privado en las estrategias de seguridad de la ciudad.
La situación actual ha llevado al presidente de la confederación, Miguel Ángel Díaz, a expresar su preocupación, calificando la seguridad en Bogotá como “fuera de control”. Ante esta realidad, la Confevip propone el apoyo del sector de seguridad privada mediante la utilización de patrullas, centros especializados de monitoreo, cámaras de última tecnología y drones de seguimiento especializado, entre otras herramientas tecnológicas.
La oferta de colaboración por parte de la Confevip destaca la necesidad de un enfoque integral y colaborativo para abordar la problemática de seguridad. En el comunicado, se enfatiza la importancia de la institucionalidad y se hace un llamado a la concertación del apoyo de todas las instituciones del Estado, la empresa privada y la Confevip. Esta colaboración se presenta como una respuesta conjunta y coordinada para hacer frente a una situación que afecta no solo a Bogotá, sino a las principales ciudades del país.
La propuesta de la Confevip llega en un momento en que algunos sectores de la sociedad han planteado la militarización de la ciudad como una posible solución. Sin embargo, el alcalde Carlos Fernando Galán ha descartado esta opción, argumentando que el Ejército no puede reemplazar a la Policía en su rol específico de mantener la seguridad ciudadana. A pesar de esta negativa, el alcalde reconoce la realidad de la inseguridad en Bogotá y trabaja en operativos para desmantelar puntos de distribución ilegal de armas.
La ciudadanía ha experimentado situaciones críticas, como el reciente asesinato de Hernán Roberto Franco en una zona catalogada como segura. Este hecho ha intensificado la preocupación de los ciudadanos y ha generado una demanda urgente de acciones concretas para abordar la crisis de seguridad.
El alcalde Galán ha instado a la ciudadanía a denunciar de manera confiable y ha prometido trabajar para devolver la confianza en la Policía Metropolitana de Bogotá. También ha destacado la importancia de desarmar zonas identificadas como distribuidoras de armas ilegales, subrayando la necesidad de una colaboración activa entre ciudadanos, autoridades y medios de comunicación para combatir la inseguridad.
La propuesta de la Confevip se presenta como una opción viable y colaborativa para enfrentar la crisis de seguridad en Bogotá. La coordinación entre el sector privado, el gobierno y la sociedad civil se posiciona como una estrategia integral que busca abordar los desafíos actuales y restaurar la seguridad en la capital colombiana. Es necesario que todas las partes involucradas trabajen de la mano para lograr un impacto significativo en la situación de seguridad en Bogotá y, por ende, en la calidad de vida de sus habitantes.
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Fuente de Información: https://www.infobae.com/colombia/2024/02/22/unos-450-mil-vigilantes-privados-podrian-ayudar-a-la-seguridad-de-bogota-en-que-consiste-la-propuesta-del-gremio/